AGRADECIMIENTOS AL EQUIPO HUMANO DE CICLESPALCAM.
UN
AÑO QUE PODÍA HABER SIDO MUY COMPLICADO Y SE HA CONVERTIDO EN UN SUEÑO HECHO
REALIDAD
Nunca
se sabe por dónde empezar, pero sí que puedes deducir dónde vas a acabar, aún
así, sin tú darte cuenta, ya has empezado y todo se va escribiendo solo.( Este
galimatías no deja de ser el día a día de cualquier joven de la actualidad recién llegado a la mayoría de edad como es
mi caso).
Pues
bien, hay un momento de tu vida en el que empiezas a saber lo que quieres. En
principio, podemos pensar que es bueno,( dejas de llorar y berrear sin ton ni
son y tus padres no tienen que adivinar lo que te pasa), pero a la vez puede
ser malo, hay veces que la decisión que tomas, el camino que te gustaría
seguir, no está bien visto por la gente más próxima a ti.
Empecé
a cursar Bachillerato, que no estaba
mal, mis amigos de siempre y el colegio
al lado de casa. Los profesores conocidos de años anteriores me habían
orientado con la mejor de las intenciones, me conocían y pensaban saber aquello
que más me convenía. Llegó un día donde
me di cuenta que no estaba haciendo lo que me gustaba. ¡Cuántas veces hemos
escuchado “no todo en la vida es lo que
quieres”!, sin embargo, el miedo a lo
desconocido nos ciega y nos obliga a hacer muchas cosas de las que nos
arrepentimos, y este arrepentimiento se convierte en el padre del fracaso, un
fracaso que puede que te dé una carrera, puede que te dé un estatus, pero eso,
creedme, puede ser que no te dé la
felicidad, y poco a poco llegarás a asquearte , y a renunciar a todo lo
realizado hasta la fecha y buscar de nuevo un camino que debes encontrar.
¿Por
qué hacerlo dos veces ? Siempre pensé que había que probarlo todo, pero
cuando sé que quiero una cosa, y estoy
seguro, la persigo y lucho por ella hasta conseguirla. ¿ No ha sido lo que
pensaba ? Si le he puesto ganas,
esfuerzo y dedicación, me encanta, porque la sensación es la misma, estoy
haciendo lo que yo quería hacer. Todo esto puede parecer un capricho, pero no lo es , estoy alcanzando
la cúspide de mi propia pirámide: estoy alcanzando mi “autorrealización”.
Esta
pequeña reflexión viene a colación del comentario que realicé a mis padres
cuando les informé de mi intención de abandonar el bachillerato que, por
cierto, no estaba siendo un fracaso académico Les dije que por fin había
encontrado algo que me gustaba, el C.F.G.M
de Comercio.( no hace falta que os comente qué caras iban poniendo
cuando iba argumentando mi decisión). Les tengo que agradecer su comprensión y
su apoyo tras el desencaje inicial. Buscaron mil sitios, hablaron con un montón
de directores, caps d'estudis, secretarias, administrativos... y llegamos al
momento de decidir entre dos opciones. La decisión no era fácil y no podía equivocarme.
Si me preguntarais por qué elegimos la escuela Pàlcam os diré que fue gracias a la confianza que
recibimos desde el primer momento que la visitamos.
Recuerdo
la primera visita y como cuando llegué
estaban montado un libdup.
Una de esas cosas que están de moda, donde se
enseña todo el recinto mientras se canta
una canción por parte de todos los alumnos (lo más curioso de todo es que yo
fui invitado a participar cuando todavía no era ni alumno, os confieso que me
pilló un poco desprevenido y no me atreví, cosa de la cual me he arrepentido en
muchas ocasiones). Todo el equipo que me atendió me inspiró lo más importante
en ese momento; la seguridad y la confianza que mi familia y yo necesitábamos
para corroborar la decisión que había tomado al dejar el bachillerato.
Me
matriculé y, después de esperar mucho tiempo, llegó el primer día. Se me hacía
difícil que después de unos meses sin hacer nada, pudiera reincorporarme, aun
así, poniéndole ganas y entusiasmo, lo que te gusta se convierte en lo que
estás haciendo, y lo que haces te entusiasma de tal forma que llegas a
interiorizarlo y hacerlo formar parte de
tu vida, Para ello, nos os voy a negar que fue muy importante el equipo humano que
me rodeó tanto profesores como el resto de compañeros del aula.
Empezaron
las prácticas, y con ello 10 horas de
aprendizaje diario. Ha sido la parte más durilla. Ir, volver, entrar, salir,
llevar, traer... ajetreo de ese que te da ganas de dejarlo. Las inicié en un
sitio
muy
alejado, tenía que quedarme en casa de unos
familiares a comer, regresar a casa rápido para continuar con mis actividades extraescolares que no quería
abandonar ¡ Dios mío qué stress!... vendía como un verdadero profesional, todo
debe decirse, pero, necesitaba un ajuste más normalizado. Expuse mi situación y
se entendió permitiéndome unas nuevas prácticas: Biolímpic, una tienda de
comida ecológica más próxima a mi domicilio. He aprendido muchísimo y he
conseguido poner en práctica acciones de merchandising, marketing,
comunicación, escaparatismo…Una verdadera experiencia.
Una
vez acabado el curso he comprobado que no me equivoqué y que valió la pena la
decisión que tomé al dejar el bachillerato. Tengo claro lo que quiero hacer en
el futuro y quiero aprovechar estas líneas para agradecer a aquellos que
confiaron en mí, principalmente mis padres. Quiero agradecer también a la
escuela por permitirme seguir soñando y
a mis nuevos compañeros y amigos de la escuela Pàlcam sin los cuales
esto hubiera sido mucho más difícil.
Álvaro García
Alumno ciclo de Comercio escuela Pàlcam